Es obsoleto el sistema educativo argentino

Lejos de adaptarse a la modernidad, el sistema educativo Argentino busca más carga horaria para una situación de presión a punto de colapsar.

Un poco de todo 14 de mayo de 2022 Redacción
El gobierno quiere que los chicos vayan más horas a la escuela.
El gobierno quiere que los chicos vayan más horas a la escuela.

EL Gobierno nacional se encuentra evaluando incrementar la carga horaria de los colegios para que esta pase de 4 a 5 horas, o que se lleve a cabo un doble turno después de las vacaciones de invierno.

De acuerdo a los dichos del Ministro de Educación Jaime Perczyk:

La idea es que todas las escuelas las podamos pasar a jornada completa. Es intentar que nuestros hijos tengan más horas. 

No obstante, la propuesta del Gobierno debe ser también aprobada por la comunidad educativa. En la actualidad, y según datos del propio Ministerio de Educación:

El 86% de los alumnos en la Argentina tienen cuatro horas diarias de clase, mientras que el 14% tiene jornada completa.

El Ministerio de Educación quiere recuperar el tiempo perdido en pandemia

La iniciativa que encara el Gobierno nacional busca que los alumnos recuperen aquellos saberes a los cuales no pudieron acceder durante el tiempo en que las escuelas se encotraron cerradas, por el aislamiento por Covid-19.

Para que esto sea posible, se fueron generando escuelas de verano (entre enero y febrero 22), en Buenos Aires y otras provincias. De igual modo, se inauguraron espacios de aprendizaje a contraturno mediante lo que se conoce como Programa ATR.

Para sostener la propuesta se vienen contratando docentes reemplazantes y estudiantes de los últimos años de la carrera. En tanto, indican que los docentes recibirán "un aumento proporcional por la nueva jornada laboral".

Al respecto, el ministro Perczyk señaló que:

El gobierno nacional tiene como prioridad a la Educación y por eso esta nueva inversión de $ 18.000 millones para aportar el 80% del aumento del sueldo de las y los maestros.

Bajo rendimiento académico

Para el objetivo propuesto por el Gobierno, la decisión de agregar horas de clases es más que correcta. De este modo se recuperarían las horas perdidas en pandemia. En tanto, si pensamos que la carga horaria se relaciona directamente con el rendimiento académico de los estudiantes, allí comenzamos a dudar de la decisión anunciada por el Ministro de Educación.

Los expertos consultados al respecto, señalan que iniciar a las 7 de la mañana la jornada escolar produciría un descenso en el rendimiento de los estudiantes.

En tal sentido, el biologo y director del Laboratorio de Cronobiología en la Universidad Nacional de Quilmes, Diego Golombek, sostiene que: 

Se debe pensar muy bien la logística. Adelantar el horario a las 7 o 7.30 no es conveniente porque se disminuye la cantidad de horas de sueño y obliga a los chicos a entrar al aula sin luz, lo que es contraproducente desde el punto de vista biológico.

Entonces... ¿En que horario los alumnos deberían ingresar a clases, para favorecer un rendimiento académico mayor?

Para Axel Rivas, director de la Escuela de Educación de la Universidad de San Andrés:

Hay mucha evidencia que se ha recolectado en los últimos años acerca de la importancia de las horas de sueño para el aprendizaje, la salud y el desarrollo cognitivo de los niños y jóvenes. Tenemos que hacer todos los esfuerzos posibles para proteger los horarios de sueño, con una mirada multidimensional.

Calendario de vacunación obligatorio para perros en Argentina¿Cuáles son las vacunas obligatorias para mi perro?

En cuanto a la cantidad de horas de sueño, Golombek añade:

En el caso de los adolescentes, no debe ser menor a ocho, mientras que para los niños debe superar las nueve horas. La Argentina se encuentra en líneas generales por debajo del promedio, sobre todo el grupo etario de los adolescentes. Se exponen a pantallas continuamente y estimulan el reloj biológico y la cantidad de horas de sueño necesarias se comprime. El colegio comienza a una hora determinada, así que se debe adelantar la hora de acostarse.

Desde este punto de vista, el horario de ingreso no puede ser previo a las 8, idealmente las 8.30. Sucede que si las clases se inician después de las 8, se reduce el índice de inasistencias de los alumnos. Al respecto Golombek indica que:

Algunas pruebas piloto demostraron que si se comienza después de las 8, los chicos y chicas faltan menos, no se enferman tanto y su rendimiento escolar es mejor.

Y agrega:

La luz de la mañana es fundamental para sincronizar el reloj biológico, que es el que marca los tiempos de nuestra vida. Si el reloj no está adecuadamente sincronizado, aparece la somnolencia, baja la productividad, el estado anímico no es tan bueno y también aumentan los accidentes.

Para Gustavo Zorzoli, ex rector del Colegio Nacional de Buenos Aires, el rendimiento escolar se vería gravemente afectado si se adelanta el horario de ingreso a los colegios.

El rendimiento de los chicos varía en función del horario al que se levantan. Adelantar la jornada educativa pareciera que no tuviera buenos resultados, es algo para pensar y discutir. El horario escolar a las 7, como se establece en la Argentina, es muy temprano y las condiciones climáticas lo hacen aún más difícil.

© UNICEFUNI354547Andrade

Problemas y soluciones de la educación Argentina

La educación está en crisis en Argentina desde hace ya varios años. El problema de la educación se acrecentó durante la pandemia, por las razones que todos conocemos: clases virtuales, alumnos con conexión deficiente de internet o carencia de equipos tecnológicos para poder conectarse, docentes con escazas capacidades tecnológicas para afrontar la nueva situación, y un sinfín de problemas que se desprenden al abordar cada situación en particular, tanto de alumnos como de docentes.

Las ocupaciones cotidianas en que las familias están inmerzas no permite que estas pongan el foco en la importancia verdadera que la educación tiene, por eso no reclaman mejores condiciones de aprendizaje para los niños.

Durante el XI Foro de Calidad y Equidad Educativa, se presentaron las  Mesas de Diálogo para el Aprendizaje en Argentina, conocidas por sus siglas como MEDIAR. A través de ellas, se llevó a cabo el siguiente diagnóstico sobre la educación en Argentina:

  • Ausencia de proyecto político educativo. A la clase dirigente no le interesa construirlo, pues la sociedad no lo reclama.
  • Gran cantidad de leyes, pero bajo cumplimiento de las mismas.
  • Debilidad en los roles vinculados a la educación, fundamentalmente entre el gobierno nacional y las provincias.
  • Financiamiento. No se cumple con el presupuesto educativo que, por otra parte, es marcadamente asimétrico entre las 24 jurisdicciones que componen el país.
  • La escuela es la única institución sólida. Y por esta razón se convierte en sede de las cuestiones sociales y problemáticas de las cuales no debería responsabilizarse.
  • El sistema educativo afronta demasiadas exigencias, en especial el secundario.
  • Gran asimetría entre los saberes que se enseñan en los secundarios de cada provincia, más allá que existan contenidos obligatorios.
  • Sobreexigencia en los docentes y al mismo tiempo falta de evaluación sobre ellos.

Del mismo modo, se esbozaron propuestas para mejorar la educación argentina. Desde las Mesas de Diálogo para el Aprendizaje coincidieron en la siguiente síntesis:

  • Docentes. Se propuso recuperar el Plan Nacional de Formación Continua y Situada, sumando a todos los actores a la discusión de los contenidos. Mantener la gestión del Instituto Nacional de Formación Docente (INFoD). Que el gobierno nacional promueva en cada provincia la conformación de su propio instituto de formación continua que trabaje en diálogo con el INFoD. 
  • Secundario. Es necesario mejorar el acceso y modo de aprendizaje que los chicos tienen en inicial y primaria, extendiendo a todos la doble jornada en primaria. Que los docentes puedan profundizar contenidos antes que dar muchos contenidos. Que los estudiantes incorporen sólidos aprendizajes en Matemática y Lectura, además de habilidades en tecnología y pensamiento crítico.
  • Nueva pedagogía. Empezar a incorporar nuevas formas de enseñar y aprender, de producir y transmitir conocimiento en el marco de una escuela que cuente con información de calidad y dispositivos tecnológicos para no estar aislada de esos conocimientos.
  • Cultura de la evaluación. son necesarias las evaluaciones tanto de estudiantes como de docentes. Deben estar centradas en el mejoramiento, tiene que llevarse adelante con una construcción de políticas que acompañen los déficits y solucionen las problemáticas que se detectan para no ser punitivas sino constructivas.
  • Rol de la escuela. Debe empezar a pensarse como la promotora de cambios sociales.
  • Financiamiento. Las condiciones laborales, salariales y de infraestructura son necesarias para enseñar y aprender. Se debe cumplir el porcentaje del PBI previsto por la ley y se debe monitorear cómo y dónde fue gastado el presupuesto.
  • Proyecto educativo institucional. Debemos construir un plan nacional de educación de entre 10 y 15 años más allá de una gestión precisa de Gobierno. También rediseñar el rol del Ministerio de Educación Nacional para que acompañe respetando las singularidades.

Nerdeando por email. Recibí el Nerdsletter directo a tu inbox! 👾